Tenía mis palabras reservadas para un momento como este. Deseaba encontrar una ocasión para soltar la boca y ayer llegó. Le dije algo que le bajaría el altísimo ego, algo que disfruto hacer con los megalómanos y es mi especialidad. No hubo respuesta de tu parte al instante, pero sabía que hervías de coraje.
Esta mañana me encantó escuchar: "Tienes razón, nadie me había hablado como tú". Y ahora te digo algo nuevo: "¡Quédate con tu abuelita!"
1 comment:
andale!!! mucha furia,, ya entiendo cuando me dices que eres muy enojona :D ntc así son las mujeres taurinas como vos :D
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